Así de cruda es la conclusión que saco tras dos años de investigación en el tema de los deportes electrónicos (eSports). Este estudio titulado “El contrato de trabajo en los deportes electrónicos (eSports)”, publicado en la Revista Aranzadi de Derecho del Deporte nº 56, 2017, analizo esté nuevo fenómeno de las competiciones en los juegos en internet.
Que es un fenómeno de masas con una proyección de crecimiento enorme, nadie lo pone en duda. Pero una de las cosas que analizo en el trabajo es si estas competiciones de videojuegos pueden considerarse deporte y con ello a sus jugadores deportistas.
Para ello, analizo la definición de deporte más utilizada internacionalmente que dice que “será deporte todo voluntario intento de sobreponerse a obstáculos innecesarios siempre que exista cierto nivel de actividad física y tenga cierta estabilidad o institucionalización” (SUITS).
De esta forma, para diferenciar un juego de un deporte, se piden tres características:
- Que haya habilidades y no solamente suerte
- Que haya actividad física
- Que esté institucionalizado o tenga cierta estabilidad
Respecto a la primera cuestión, solo hay que ver a un Jugador profesional en comparación a uno amateur para saber que la diferencia solo viene por horas de entrenamiento. Respecto a la tercera característica ya existen federaciones a nivel nacional e internacional que aseguran su –institucionalización-. La única duda, entre los expertos mundiales en el tema es la cuestión de la actividad física. Si no hay actividad física, las competiciones de videojuegos no podrán considerarse deporte.
Pues bien, no cabe duda que los jugadores de videojuegos no son futbolistas ni boxeadores. Son jugadores que pasan mucho tiempo sentados y su actividad física consiste en mover el ratón y pulsar sobre el teclado –eso sí, a gran velocidad y con una necesaria coordinación mano-ojo-. Así pues actividad física hay, la duda viene sobre qué nivel de actividad física se requiere para poder entender que hay práctica del deporte de “verdad”.
Tras mucho tiempo dedicado a reflexionar sobre este tema -dado que muchos expertos están en contra de considerar los deportes electrónicos como deportes-, y tras sopesar argumentos a favor y en contra, he concluido que los deportes electrónicos son verdadero deporte y sus jugadores son verdaderos deportistas. Aquí la razón:
Es cierto que, tradicionalmente, aquello que la sociedad considera actividad física deportiva –lo que la sociedad considera deportes “reales”- está muy relacionado con un tipo de masculinidad muy determinado. Los deportes más exitosos y lucrativos implican niveles altos de altura, peso, fuerza y velocidad así como agresiones personales, poder y contacto físico (fútbol, boxeo, etc…). De esta forma, descartar como deporte “real” los eSports debido a que la actividad física realizada no responde a el patrón clásico de masculinidad/agresión física podría ser considerada una imposición de valores “masculino/tradicionales” al resto de la sociedad.
Es decir, deportes cuya actividad física siga otros patrones deben considerarse igualmente deportes incluyendo los deportes electrónicos.
Ahora bien, a la vez que se defiende esto, no es posible que la industria de los eSports se centre exageradamente en hombres impidiendo equipos mixtos como en el futbol y otros deportes “tradicionales!. Si los eSports es el deporte del S.XXI, como yo creo que lo será, es necesario que defienda valores del S.XXI también.
Si te interesa el tema de los eSports o deportes electrónicos suscribete al Blog. La próxima semana hablaré de el contrato de los deportistas profesionales.
Para defender la presencia de la actividad física suficiente para ser considerado un deporte bastaría comparar los deportes electrónicos con el ajedrez que, a pesar de exigir un esfuerzo físico menor son considerados un deporte en su versión de competición.
A lo que se refiere a la ausencia de mujeres en los equipos profesionales, a mi parecer se debe a dos razones que aunque sean algo simples para tratarse de un blog de derecho no son menos verdaderas:
En primer lugar a la escasa cantidad de tiempo desde que se practica seriamente el deporte electrónico que de por si solo no tendría porque justificar la ausencia del sexo femenino en el, sin embargo va de la mano de un cliché muy extendido: el de que los videojuegos “son para chicos”.
Ademas, siendo sinceros, se hace difícil tomarse en serio la participación femenina en competiciones cuando el 99% de los canales de twitch donde las chicas juegan al LOL solo reciben donaciones porque juegan en ropa interior y no por la calidad del juego. No es una opinión machista y espero que no se me tome por tal, el la cruda realidad, no creo que se tenga que callar solo porque sea ofensiva